MI MANIFIESTO

Hasta el día en que nuestras almas reaccionarías no nos dejen en paz, hasta entonces no vamos a dejar de luchar por sobrevivir.

Mientras permanezcamos fieles y plenas a nosotras mismas, no habrá reproche alguno que hacernos al final.

Y no estamos solas, las multifacéticas yo´s de una sola cara; la física, nos tenemos las unas a las otras.

Por que no hay casilla alguna en la que tengamos lugar, somos las autonombradas locas, que en su locura quieren permanecer.

Por que creemos en mundos de posibilidad, reaccionaremos siempre en contra de la igualdad que crea paradigmas, que evade riesgos, que cuarta.

Declaramos que no creemos en el sentido común, el mundo ideal es el que se mueve por voluntad propia, que tiene sus razones; propias o apropiadas (es decir agandalladas) pero las tiene presentes.

No por cómodo es natural un mundo autómata de gente caminando hacia ningún lugar. Aclaramos que estamos a favor de caminar hacia ningún lugar, siempre y cuando sea conscientemente y por propia voluntad.

Paradigmafóbicas, protestamos ante un mundo de estructuras preestablecidas.

Protestamos en contra de un mundo de falacias, de falsas promesas, de razonamientos prácticos.

Reclamamos nuestro derecho a detenernos a pensar.

Nos declaramos creyentes del amor y la magia, de las bromas y las conspiraciones cósmicas.

Creemos ciegamente en la fe, aunque a veces la fe sea débil. Intentamos mantenernos feligreses fervientes de la pasión, por la vida propia, y de extraños.

Estamos a favor de las diferencias que crean complementos, que permiten crecimiento, que son vivo ejemplo de la libertad, valor que personalmente valoramos en exceso positivo.

Reclamamos el derecho a gritar.
A gritos manifestamos nuestras emociones mas profundas. Pedimos atención también cuando en silencio gritamos nuestra inconformidad.

Me manifiesto egoísta humanista, no egocéntrica ni ejemplo para la humanidad.