lunes, marzo 27, 2006

- 5 semanas y el panorama: incierto

miércoles, marzo 22, 2006

- 6 semanas (poquito menos) y contando

PENSANDO EN VOZ ALTA: AUTOTRAICIÓN

El problema no está en que en un una noche estrellada, la misma noche para ambos, tu vez el cielo de un pueblo y yo veo un cuadro de Van Gogh.
El problema no es que no pueda aprender a ver la belleza del cielo de un pueblo sin las luces citadinas, ni que tu no puedas aprender a pensar en Van Gogh con un cielo estrellado.
El problema es que no me compartes de tu visión, el problema es que lo que para ti es amor, yo no lo entiendo por que nunca me lo explicas y yo no lo sé.
- … el amor no se explica se da- dísese dicho popular atascado de verdad, - se ve, se siente, el amor está presente- mmm, i´m faithless now (´cause i just made my best and couldn´t felt anything coming from you, just saw a boy runing trying to kept himself on the rush).

Todo lo que podría decir:
Podría decir que te amo, pero no lo sé,
¿qué es amar?
Además ni me gusta esa palabra anyway,
Suena muy madura, tal vez por eso no se escucha bien en mi voz (and never did).
¿Amor solo lo es sí no cambia, aún si mientras yo escribo tú estás amando a alguien más? (sí es asi, entonces no sé amar)

El problema del desamor radica en la inseguidad de la gente, por creer más en el otro que en sí mismo. La solución: ¿no creer cuando nos dicen “no te quiero”, creer lo que tu quieres creer?.
Debería importarme nada tu opinión y tu amor, si supiera que yo soy más que tu (por que en teoría me conozco mejor) para opinar acerca de mí misma. ¿Y por qué me importa tanto tu opinión carajo?

El problema está en que tu piensas en escaleras al cielo y yo pienso en árboles mágicos que llegan al cielo, pero al final los dos caminos van al mismo lugar. ¿Cómo hacer para compartir las visiones entonces? Meros trámites, problemas de percepción, simples, es lo que veo de complejo en esta situación.

Vemos el mismo cuadro y aún así, yo veo los colores, tu vez al hombre que se esconde entre la gente. Tenemos la misma historia pero se parte en dos mitades diametralmente opuestas como tu y yo.





By the way, ¿por qué las tres últimas palabras de un texto no puede ser el final?.

lunes, marzo 20, 2006

LOSERS

boy oh boy,
quién se dirá estúpido ganador al final,
tu paciencia eterna o mi orgullo mortal?

anyway...
siempre saldrémos perdiendo tu y yo.

miércoles, marzo 15, 2006

DE COLORES

A todo esto (lo que viene), mi emoción es por que resulta que Óscar de la Borbolla da clases en Metepec.

Aaaa tan cerca de mi y yo sin saberlo.

Tal vez nunca me inscriba, por que son 2 años, y no quiero estudiar 2 años más, no ahora.

Anyway... esto fue el "desahogamiento", de la noticia que por simple que parezca le

devolvió el sentido a mis días.

No sé si les habrá pasado, cuando se enamoran, sienten que aman todo lo que les rodea, el

ánimo mejorá, etc, etc Algo similar me pasa, no sé cuanto dure, pero por primera vez en muchos

muchos meses, mi amargura disminuyo un poco... solo disminuyó. Saber esto fue como

enamorarme, pero mejor, por que ésta ocasión no venía incluida la sonrisa estúpida en mi rostro,

digamos que solo la emoción.

Aunque nadie acudió a mi llamado de auxilio o advertencia de suicidio en "?qué cómo estoy?"...

solo por si acaso ahora si se lo preguntaran, así es como me pinta la vida el día de hoy: de colores

(oscuros).

Fe errante

Antes de que desaparezca (la fe, claro está), diré unas palabras que robé el día de ayer por que me parecieron beshas:

"... Larguémonos, chico hacia el mar..."
"Vamos a Acapulco, nos mojamos los pies en el mar y nos regresamos"


.
.
.


"Y quizá si que nací para apostar"

Y qué y qué y qué... lo amo

Un grito prisionero se convierte en lágrimas. El pecho se cierra hasta que comprime mi corazón. Mis hombros me aplastan. Ansiedad, al escuchar un solo nombre: Óscar. Óscar de la Borbolla. Quién soy y quién quiero ser para lograr un fin único, articular una sola palabra elocuente frente a él.

domingo, marzo 05, 2006

¿QUÉ CÓMO ESTOY?

El mal sabor de boca de la vida, me ha causado mal aliento, solo el aliento etílico sustituye el del astío. Sin el calor que consuela, y el viento de principios de marzo, en verdad moriría.

He leído tanto para encontrar sentidos en las hojas de otros libros que no son el mio, que ya no sé quien dijo que, todo un peligro, corro el riesgo de cometer plagio confundiendo palabras ajenas con las propias.

A punto de terminar mi carrera profesional, los estudios me han valido para una cosa, para no poder luchar nunca más contra mi falta de fe en mi misma. Para poder argumentar y comprobar lógicamente el poco valor de la vida de la gente, pero claro principalmente el poco valor de la propia.

Me falta un poco más de ska, un poco más de lágrimas, un poco más de humor, un poco mas de tiempo, un poco mas de libertad, un poco más de sol y de calor definitivamente, un poco mas de fe y dinero en la cartera para llenar mis vacíos interiores con una cámara nueva o un viaje a Londres o un diplomado en filosofía en la universidad cómicamente católica en la que debí haber estado desde hace 5 años.

Yo no lo llamaría depresión; solo es la crisis de las despedidas y los finales, los trámites de graduación me vuelven loca, paradójicamente me muero por salir, por huir como siempre. Sino fuera por que mi familia es bastante cuerda y un tanto aprehensiva ya estaría a estas alturas de la vida en Kasajistán.

¿Cómo estoy? Denigrantemente rogando por el amor de un José Luis, de un Rodrigo, de un Juan Carlos, de un Juan José o de un don nadie, no importa, solo que se enamore de mi de una forma inocentemente bella. Solo me hace falta un poco menos de dignidad, un poco menos de vergüenza o un poco mas de nalgas para lograr mi propósito.

Huyo de la falta de aceptación de la gente. Paradójicamente nadie nota más que mi capacidad de adaptación intacta, poco observadores por lo visto. Con razón me dicen rara por lo menos una vez a la semana.

Aún no logro decir en que radica mi rareza. Tal vez sea por las contradicciones, será que quien me interesa dice que soy una indiferente, que un estúpido egocéntrico cualquiera que se dice mi amigo cree que estoy celosa de su novia, que mi mejor amigo quiere ser también el mejor amigo de mi cuerpo, que no sé demostrar mi nobleza sino como pendejez, que soy la mejor hija del mundo siempre y cuando sea capaz de dormir 18 horas para la tranquilidad de mi familia. Mi rareza tal vez sea genética, es raro que el amor de mi hermano solo cueste $100 pesos para un cd que rayará al mes, soy la que sus amigos visitan cuando no tienen gas en su casa, o lugar para hacer una fiesta.

Lo único que sería capaz de mencionar a mi favor es que soy la contradicción más auténtica que he conocido. En mis momentos de optimismo tonto, dejo de culparme a mí misma por no ser merecedora del amor desinteresado de ningún tipo (de amigos, de familia, de pareja). Si nadie me quiere no es por mí. Culpo a mi gusto por un género de música indefinido, mas bien variado, hasta que me duele oír música. Culpo a mi incapacidad para ganar una medalla en gimnasia olímpica. Culpo a mi falta de memoria, y a mi dislexia. Culpo a mi himen, culpo a mi género. Culpo a mi falta de talento. Culpo a mi falta de carácter, a mi posición neutral, a mi perspectivismo, a mi silencio, a mi silencio.


Solo por si acaso visitaran mi blog, solo por si se lo preguntarán, no he muerto. ¿Qué cómo estoy?, estoy entera y mutilada, de pie y sin piernas, estoy loca y triste, y bailando y cantando, estoy despierta y soñando, viviendo y soñando, y riéndome y dando vueltas, un poco mareada de vez en cuando, pero estoy, y sigo corriendo mientras puedo, y caminando descalza y cantando muy alto, sin fe pero esperanzada. Evasivamente viviendo día con día sin llorar, sin dormir mucho, un poco feliz tal vez de vez en diario, adoptando mi soledad con un abrazo.